
Superar una ruptura puede sentirse como enfrentarte al jefe final de un juego sin armas ni estrategia. Lo sé porque lo viví.
Pasé por un momento en el que todo parecía desmoronarse: la persona en quien confiaba me había dejado, llevándose consigo no solo las cosas materiales, sino también una parte de mi identidad y estabilidad. Me quedé con nada más que mis pensamientos y una sensación de vacío.
Pero aprendí que incluso en los momentos más oscuros, siempre hay una chispa que puede devolverte a la vida. Este artículo no es una guía mágica ni una receta rápida. Es un reflejo de mi experiencia y de cómo, paso a paso, encontré la fuerza para levantarme y reconstruirme. Espero que mi historia pueda inspirarte si estás atravesando un momento similar.
El Punto de Quiebre: Tocar Fondo y Decidir Levantarte
El primer paso para superar una ruptura es aceptar que el dolor existe. Al principio, me costó mucho reconocer que estaba completamente destrozado. Había perdido no solo una relación, sino también la visión que tenía de mi futuro.
Ese vacío puede paralizarte, pero también puede convertirse en el punto de partida para algo extraordinario. En mi caso, lo primero que tuve que hacer fue mirar de frente esa realidad.
No podía cambiar lo que había sucedido, pero sí podía decidir qué hacer con ello. Fue como estar en un nivel imposible de un videojuego: podía rendirme o intentarlo una vez más. Elegí luchar.
Superar una ruptura no ocurre de la noche a la mañana. Es un proceso lleno de altibajos, pero hay ciertas cosas que realmente me ayudaron a encontrar mi camino:
- Aceptar el Dolor: No intenté ocultar lo que sentía. Permití que las emociones fluyeran, porque reprimirlas solo prolonga el sufrimiento. Lloré, grité y escribí sobre lo que sentía. El dolor es parte del proceso de sanación.
- Buscar Apoyo: En los momentos más difíciles, no tienes que enfrentarlo todo solo. Hubo dos personas en mi vida que me ayudaron a entender las circunstancias. Me recordaron que el amor y el apoyo siempre están presentes, incluso cuando parece que todo lo demás se ha perdido.
- Redescubrirme a Mí Mismo: Me enfoqué en proyectos que me devolvieran un sentido de propósito. Comencé a publicar mis libros, «Las Sombras del Mundo. Extinción Final» y «En la Mente del Lobo».
- Establecer Nuevas Metas: En lugar de quedarme atrapado en el pasado, me obligué a mirar hacia adelante. Me propuse metas claras y alcanzables, desde mejorar mi salud hasta expandir mis proyectos. Cada pequeño logro me dio la confianza para seguir adelante.
El Papel del Tiempo y la Perspectiva
Hay una frase que dice que el tiempo lo cura todo, pero no estoy completamente de acuerdo. El tiempo no cura; el tiempo da perspectiva. Con cada día que pasó, comencé a ver mi situación con más claridad. Entendí que esa ruptura no fue el final, sino un nuevo comienzo.
Me di cuenta de que el dolor que sentía era una oportunidad para crecer, para reencontrarme conmigo mismo y para construir algo mucho más grande de lo que había imaginado. Ahora, mirando hacia atrás, entiendo que esa etapa difícil fue una lección esencial en mi vida.
Si estás pasando por una ruptura, quiero que sepas que no importa cuán oscuro sea el camino en este momento, hay algo dentro de ti que te ayudará a salir adelante. Tal vez no lo sientas ahora, pero esa chispa está ahí. Tómala, aliméntala y déjala crecer. Usa el dolor como tu catalizador para el cambio.
No importa cuántas veces caigas, lo que importa es que te levantes una vez más. No es fácil, pero es posible. Y al otro lado del dolor, encontrarás una versión de ti más fuerte, más libre y más feliz.
Cierra el Círculo: Comparte tu Historia
Al igual que yo encontré fuerza en compartir mi experiencia, quiero invitarte a hacer lo mismo. Reflexiona sobre tus propios desafíos y cómo los has enfrentado. Comparte tu historia, porque juntos podemos aprender y crecer.
En este artículo me gustaría añadir un extra muy especial para el lector, unas líneas de mi libro En la mente del lobo sobre el miedo a los cambios que dice así:
“Te voy a decir algo que muy pocas personas se atreven a enfrentar, algo que muchos prefieren no escuchar porque les aterra: Necesitas tocar fondo para cambiar. Sí, es así de claro. Las personas vivimos con un miedo constante a que nuestra zona de confort, esa burbuja que hemos creado con tanto esfuerzo, se desmorone por completo. Tememos que todo aquello en lo que hemos invertido nuestro tiempo, energía y emociones se venga abajo como un castillo de naipes. Pero aquí está la verdad que muy pocos admiten: en el 99% de los casos, es necesario que todo se derrumbe para poder reconstruirte más fuerte. Necesitas tocar el fondo más profundo, verte sin nada, sin esas muletas emocionales que crees que te sostienen, para descubrir quién eres realmente y vencer el miedo que te mantiene atrapado.
Uno de los miedos más paralizantes que experimentamos es el miedo a equivocarnos. ¿Cuántas veces has dejado de hacer algo que realmente deseabas por miedo a fracasar, por temor a que las cosas no salieran como esperabas? Ese pánico es, en realidad, lo que nos mantiene encadenados a nuestra zona de confort. Y aunque esta zona parezca segura, familiar y cómoda, no es más que una prisión que nosotros mismos hemos construido. Dentro de nuestra zona de confort, controlamos casi todo. Conocemos cada rincón, cada rutina, y por eso, las probabilidades de cometer errores son mínimas. Nos sentimos invulnerables. Pero, ¿qué pasa si decides salir de ahí?”
Espero querido lector que estas líneas te hagan pensar y reflexionar para tener una visión diferente este 2025 y así crear a la persona que verdaderamente quieres ser.
FELICES FIESTAS
Sigue a NÉMESIS por sus redes: https://www.instagram.com/nemesis_luxe/
Todas las novedades en su página web: www.enlamentedellobo.es
¡Síguenos en Instagram para no perderte nada!





Como tu dices..
No importa cuántas veces caigas, lo que importa es que te levantes una vez más. No es fácil, pero es posible!!!
💪🏼💪🏼💪🏼
A por todos los retos nuevos!!!