
¡Qué rabia! La Nintendo Switch 2 llegó el 5 de junio de 2025 como un huracán, vendiendo 3.5 millones de unidades en cuatro días y convirtiéndose en la consola más rápida en despegar de la historia de Nintendo. Pero, entre la hype por Mario Kart World, Donkey Kong Bananza y las ediciones mejoradas de Zelda, hay una sombra que está empañando esta fiesta: las malditas Game-Key Cards. Estos cartuchos vacíos, que no son más que un código de descarga disfrazado de físico, son una bofetada a los que amamos coleccionar juegos y queremos algo tangible en nuestras manos. En Colossus Gamers, vamos a desmontar esta estrategia anticonsumidor y a gritar alto y claro: ¡Nintendo, escucha a tu comunidad y entierra este formato de una vez!
¿Qué demonios son las Game-Key Cards? Un cartucho que no es un cartucho
Para los que aún no lo tengan claro, las Game-Key Cards son una aberración. A simple vista, parecen un cartucho físico normal: vienen en una caja chula, con carátula y todo el rollo coleccionable. Pero, cuando lo metes en tu Switch 2, sorpresa: no hay juego. Solo un código que te obliga a descargar el título desde la eShop, ocupando espacio en tu microSD (que, por cierto, tiene que ser Express y no barata). Es como comprar un Blu-ray y que dentro solo haya un papelito con un link a Netflix. ¿En serio, Nintendo?
Nintendo dice que estas Key Cards ayudan a los third-parties a traer “juegos más grandes y profundos” a la Switch 2, porque los cartuchos de 64 GB son caros. Pero, vamos a ver, ¿quién pidió esto? Los fans no. Los coleccionistas, menos. Y los datos de ventas lo están dejando clarísimo: la gente no quiere estas porquerías.
Las ventas hablan: Muy pocos han comprado Key Cards
Desde el lanzamiento de la Switch 2, las Game-Key Cards han sido un fiasco. Mirad estos números, que no mienten:
- Títulos third-party en Key Cards, un desastre: Según The Game Business, el 80% de las ventas físicas de juegos en Switch 2 son de first-party (como Mario Kart World), mientras que los third-party, casi todos en Key Cards, se estrellan. Un desarrollador anónimo confesó que las ventas de su juego estaban “por debajo de las estimaciones más bajas”. ¿Ejemplo? Yakuza 0: Director’s Cut y Bravely Default Flying Fairy HD, ambos en Key Cards, apenas se mueven en Amazon Japón.
- Tiendas físicas, confirmando el rechazo: Kelsey Lewin, de Pink Gorilla Games, dijo en Bluesky que “nadie está comprando” las Key Cards en su tienda, a pesar de tener expectativas bajas. En foros como NeoGaf, los coleccionistas reportan que ediciones limitadas como Disgaea 7 Complete: Ewwdo Edition no se venden por ser Key Cards.
- Amazon Japón, un reflejo cruel: Solo el 29.8% de las ventas físicas de juegos exclusivos para Switch 2 son Key Cards, frente al 41.4% de cartuchos completos. Y de los top 5 juegos físicos más vendidos, solo Yakuza 0 usa este formato.
En las redes, la comunidad está que echa humo. En X, gamers como @Nintendeal lamentan que, de 26 juegos físicos anunciados, 22 son Key Cards. Otros, como @Stealth40k, dicen que prefieren comprar en PS5 o digital antes que apoyar este formato. Hasta en Japón, donde lo físico es religión, los third-parties han apostado todo a las Key Cards y están pagando el precio.
¿Por qué son un error? Anticonsumidor y anti-preservación
Las Game-Key Cards no solo son un timo, sino que van contra todo lo que los gamers valoramos:
- No son físicas de verdad: Pagas 80-90€ (¡a veces más que un cartucho completo!) por algo que depende de internet y de los servidores de Nintendo. Cuando la eShop cierre en 10 o 15 años, adiós juego. ¿Preservación? Cero. Los juegos físicos de Switch 1, como The Witcher 3, venían completos en un cartucho de 32 GB por menos dinero.
- Costes inflados: Nintendo solo ofrece cartuchos de 64 GB o Key Cards, nada de 8 o 16 GB como en Switch 1. Esto obliga a los third-parties a elegir lo barato, pero el precio no baja para nosotros. Hitman: World of Assassination en Key Card cuesta 100 AUD, igual que un juego completo.
- Almacenamiento abusivo: Con juegos de 50 GB o más, necesitas microSD Express caras (1 TB no baja de 100€). La Switch 2 solo trae 256 GB internos, una broma en 2025. Compara con PS5 o Steam Deck, que dan 512 GB o 1 TB de base.
- Confusión en tiendas: Los compradores casuales no saben que están comprando una descarga. Imagina la cara de un padre que compra Star Wars Outlaws para su hijo y descubre que no puede jugar sin bajarl.
La comunidad ha hablado: queremos cartuchos completos
No todo es culpa de Nintendo; los third-parties como SEGA, Ubisoft y Square Enix han abrazado las Key Cards con entusiasmo. Pero Nintendo, como líder, debería haber ofrecido más opciones de cartuchos (8, 16, 32 GB) para evitar este desastre. En cambio, están empujando a los consumidores hacia lo digital, como ya hacen Sony y Microsoft, donde el 90% de las ventas son digitales. ¡Pero los fans de Nintendo no somos así! El 80% de las ventas de juegos en Switch 2 son físicas, y la comunidad sigue valorando tener algo en la estantería.
Hay esperanza. CD Projekt Red, con Cyberpunk 2077, optó por un cartucho completo y es el third-party más vendido en Switch 2. Publishers como Lost In Cult están prometiendo “cartuchos completos” para sus juegos. Y la presión de los fans está funcionando: cuando Alan Wake 2 salió solo en digital, las ventas se hundieron y Remedy lanzó una edición física. Si no compramos Key Cards, los third-parties tendrán que escuchar.
Nintendo, hazlo mejor
La Switch 2 es una consola brutal, y juegos como Mario Kart World o Metroid Prime 4 demuestran que Nintendo sigue siendo el rey de la diversión. Pero las Game-Key Cards son un error garrafal. Son anti-consumidor, caras, y traicionan el espíritu de coleccionismo que define a los fans de Nintendo. Los datos de ventas y el cabreo en X y foros lo dejan claro: nadie las quiere.
Mi deseo es que este formato muera rápido. Que Nintendo ofrezca cartuchos más pequeños y asequibles, y que los third-parties vean el ejemplo de CD Projekt Red. Gamers, haced como @Kurusonna y hablad con vuestra cartera: no compréis Key Cards. Si queremos un futuro donde los juegos físicos sigan vivos, tenemos que plantarnos ahora.
¿Qué pensáis? ¿Os tragáis las Key Cards o estáis conmigo en esta cruzada por lo físico?

