
Electronic Arts (EA), una de las compañías más influyentes de la industria del videojuego, ha cerrado un acuerdo histórico de venta por 55.000 millones de dólares. Con esta operación, la empresa pasa a ser privada bajo el control del Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudí, en colaboración con Silver Lake —firma dirigida por Egon Durban— y Affinity Partners, la compañía de inversión fundada por Jared Kushner, yerno de Donald Trump.
Fundada en 1982 por Trip Hawkins, EA ha estado presente en todas las generaciones de consolas y PC, consolidando franquicias de referencia como FIFA, Madden NFL, Battlefield y The Sims. El acuerdo se espera que quede completado durante el primer trimestre fiscal de 2027.
Declaraciones del CEO de EA
El actual director ejecutivo, Andrew Wilson, afirmó en un comunicado que este acuerdo supone “un poderoso reconocimiento al trabajo extraordinario de nuestros creativos y apasionados equipos, que han ofrecido experiencias inolvidables a cientos de millones de jugadores y creado algunas de las sagas más icónicas del sector”.
Wilson añadió que la compañía seguirá expandiendo sus horizontes: “De cara al futuro, seguiremos ampliando los límites del entretenimiento, los deportes y la tecnología, abriendo nuevas oportunidades. Junto con nuestros socios, crearemos experiencias transformadoras que inspirarán a las generaciones venideras. Estoy más ilusionado que nunca con el futuro que estamos construyendo”.
Una compra con impacto más allá de los videojuegos
La adquisición no solo tiene relevancia económica, sino también social y cultural, dado el peso de las propiedades intelectuales de EA en el entretenimiento global. Franquicias deportivas como FIFA o Madden, junto a sagas de acción como Battlefield, han marcado a generaciones de jugadores y son activos clave en este movimiento estratégico.

